Debate

Me ha costado bastante ponerle un título hasta entrada y aún sigo pensando si es lo suficientemente convincente o no. En fin.

El tema que quería plantearos es ¿hasta donde deberíamos llegar los escritores al modificar nuestras historias para tener más éxito y más posibilidades de venta o de alcanzar un reconocimiento? Me ha surgido esta incógnita porque estoy escribiendo un relato para un concurso del que hablé en el grupo "Premios literarios" (la antología bestiario de Hela Ediciones) y al recibir comentarios de mis lectores cero la mayoría coinciden en que mi final es demasiado apresurado. Es algo que me pasa muchíiisimo, en especial cuando escribo relatos para concursos con límites de palabras ajustados (5.000 o menos): me extiendo mucho en el nudo y para cerrar la trama corro, se me desboca y pierde ligeramente el sentido.

Este concurso en concreto es importante para mí porque es la primera vez que mando algo a una editorial y estoy tan enamorada de la historia que verdaderamente quiero esforzarme todo lo que pueda para que tenga alguna opción. He pensado una alternativa para el final que no me disgusta, pero... Ya no sé si mi cabeza quiere cambiarlo porque realmente le gusta y le parece mejor o porque ve que así igual hay más suerte.

¿Os habéis vista alguna vez en una situación así? Sabiendo que el texto que tenéis está bien pero que solo le hacen falta ciertos cambios para, tal vez y según bajo algunos criterios, estaría mejor, ¿lo cambiaríais?